martes, 18 de noviembre de 2008

¿POR QUÉ? ¿POR QUÉ? ¿POR QUÉ?


¿Por qué no lo he hecho? ¿Por qué, por unos instantes, he sido como ellos? Como esa masa inerte que me rodea, inmersa en un mundo inexistente, creado a su medida con tal de permanecer aislados, con una felicidad - más bien impasibilidad -, de pega, que no se corresponde - ¿o sí?¡No! - con su hueco interior.
No lo he hecho y me siento mal porque a menudo las cosas suceden porque no hay quien las evite o las quiera evitar.
Yo no sueño con ovejas eléctricas, sueño con personas de carne y hueso, de interior blandito, emocionantes y, sobre todo, capaces de emocionarse.
Y me resisto a parecerme a ellos; lo hoy sucedido me reafirma en mis convicciones. No voy a ceder al desaliento ni ante la falta de gratitud.
Me gusta cómo soy. No me desanimo.

Why so serious?


* Fotografía: bolboreta.

3 comentarios:

Refrescospepito dijo...

¿Pero qué te ha pasado, mi niñaaaaaaaaaa?
¿Quién te ha hecho mal?
Mira, ya va a venir el diablo a llevarse a esos capullos que te han herido...
(Vaya, se ve que el diablo no encuentra taxi).
No importa, conozco unos chicos muy simpáticos con unos bates de béisbol que por un módico precio (y una comisioncita para mí) te hacen el trabajo que quieras y doy fe de que siempre parece un accidente.

bolboreta dijo...

La gente es mala, pero a veces yo también lo soy.

Anónimo dijo...

Lo que llamamos “maldad” es la expresión del humano ante la falta amor. Creemos conocer el significado, pero quizá su definición se queda corta… ¿acaso nunca hemos sido malvados?
Te has preguntado que piensa aquella persona a la que has roto el corazón alguna vez porque no te interesaba. Que has pensado cuando te lo han roto a ti, ¿quién es el verdugo y quien la victima? En este contexto ¿no creen que todos somos malvados?
Todos somos víctimas de victimarios…